Vía MOPC
En las próximas semanas, un equipo técnico y político de Corea visitará nuestro país a fin de ajustar los detalles previos a la firma de un Convenio o Tratado entre ambos países que concrete definitivamente el proyecto Tren de Cercanías.
Básicamente este acuerdo consistirá en que Corea otorgará al Paraguay un préstamo en condiciones muy difíciles de acceder si no fuera de esta forma, y aparte de lo meramente financiero, realizará una trasferencia de tecnología al país, instalando de nuevo como en la época de Don Carlos Antonio López una industria ferroviaria, hoy inexistente.
El diseño, la construcción, la operación inicial y el mantenimiento, con lo más completo y último disponible hoy día en el ámbito a nivel mundial, se convierten así en un verdadero aporte coreano al Paraguay. Este aspecto fue constatado en las visitas realizadas por la comitiva paraguaya en Seúl, que observó el desarrollo tecnológico y la inversión permanente que Corea realiza en Investigación ferroviaria, es decir, la oportunidad que tiene Paraguay es inmejorable.
Recordemos que el pasado jueves 9 de setiembre se realizó la firma del Memorándum de Entendimiento entre el Ministerio de la Tierra, infraestructura y Transporte de Corea (MOLIT) y el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), así como el Acuerdo para el Desarrollo del Proyecto entre Korea Overseas Infrastructure & Urban Development (KIND) y Ferrocarriles del Paraguay S.A. (FEPASA).
De esta manera se plasmaron en los papeles la voluntad de ambos países de desarrollar en conjunto el Tren de Cercanías, con el apoyo decisivo del país asiático, que con su mejor predisposición pondrá la financiación en condiciones inmejorables, el diseño, la construcción, la operación en el momento inicial, y el mantenimiento de todo el sistema a ser instalado en Asunción.
Todo el viaje fue preparado por KIND con la idea de aprovechar al máximo la presencia de una comitiva tan importante pocas veces vista en Corea. KIND es una Corporación dependiente del Gobierno coreano, y sujeta a MOLIT. En ese sentido, es parecida a FEPASA, institución privada del Estado Paraguayo.
La abultada agenda desarrollada la semana pasada por la comitiva nacional, liderada por el ministro de Obras Públicas Arnolo Wiens, incluyó reuniones y visitas de campo con todo el espectro de actores relacionados al proyecto.
Para hablar de las implicancias y necesidades financieras la delegación se reunió con el Presidente y Chairman de Korea Eximbank, Moon Kyu Bang y su directiva.
Los temas propiamente ferroviarios fueron tratados en reuniones con Korea National Railway y con Korea Railroad Research Institute, mientras que para conocer más sobre la fabricación de material ferroviario, el encuentro fue con Hyundai Rotem.
También se habló de todo lo relacionado al aspecto eléctrico de transmisión y operación con LS Electric y para algunos aspectos de la construcción con Kyeryong Construction Industrial.
Finalmente, en lo que respecta a la dirección general e inversión principal, la reunión fue con Hyundai Engineering Co., una de las empresas constructoras más grandes del mundo y la que va a liderar el proyecto ferroviario en el Paraguay.
Las sensaciones e impresiones fueron de un compromiso en aumento en ambas partes a medida que transcurrían los días de la agenda. Existía un cierto escepticismo en Corea respecto a la importancia que otorgaban al proyecto en el Paraguay, por lo que ya desde las primeras reuniones eso fue cambiando con las intervenciones de las autoridades paraguayas, que expresaron la absoluta prioridad que este Tren de Cercanías tiene para el pueblo y el gobierno.
Lo ocurrido en la semana, así como la misma ceremonia de firma de los documentos, marcada por una solemnidad muy notable, como la importancia que MOLIT otorgó a ese momento y las palabras pronunciadas, vinieron a enmarcar un momento muy especial en el relacionamiento entre ambos países, que dentro de unos meses cumple 60 años.
Con un presupuesto de más de USD 60 mil millones, mucho mayor que el de Defensa (conociendo la delicada situación de Corea del Sur en ese ámbito), MOLIT es una de las instituciones más importantes de Corea, y eso se notó en la cargada semana de trabajo y en la ceremonia. Lo que MOLIT decide y firma, todo el resto de las instituciones públicas y privadas siguen, como es lógico.
Por eso, el ambiente no puede ser mejor en este momento entre ambos países, y el Tren de Cercanías para el Paraguay está más cerca que nunca de concretarse.
Las reuniones prosiguieron tan rápido se firmaron los documentos, y mientras la comitiva paraguaya viajaba de regreso a Asunción en un larguísimo periplo, las instituciones interesadas en participar del proyecto, públicas y privadas, ya se estaban reuniendo convocadas por MOLIT.
Volver a instalar trenes de pasajeros en el país, como en 1860, no es tarea fácil. Los ferrocarriles –en realidad todas las instituciones– necesitan inversión permanente en su mantenimiento, renovación y actualización. Lo más costoso siempre es la inversión inicial en su implantación, puesto que el retorno que tienen los trenes de pasajeros es social, no financiero. Si Paraguay hoy se propone volver a implantar el sistema ferroviario se debe a las distintas ventajas y beneficios que tiene, sobre todo para la gente y su traslado laboral diario. La popularidad de los trenes en todo el mundo, en el día a día, hace necesaria su existencia. El Paraguay está dando los pasos para su definitivo retorno, y junto con los trenes, también el de su autoestima original del siglo XIX.
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